sábado, marzo 14, 2009

La mirada de la curiosidad

Cuanto más mayores nos hacemos más perdemos la capacidad de sorprendernos o de encontrar cosas que nos maravillen y nos hagan literalmente abrir la boca y poner los ojos como platos.

Envidiamos a los niños por esta capacidad de ilusión, sin embargo nos consolamos con las emociones que nos transmiten al ver estas expresiones.


Warning
Mi sobrino Aimar puso esta cara al ver saltar y parpadear el pequeño flash mecánico de la cámara, parece ser que era la primera vez que veía algo así, a mi casi se me cae la baba. La siguiente escena os la podéis imaginar, Aimar intentando coger la cámara y los dos tirando de ella! Esto no se toca! :-D

Me pregunto cuándo fue la última vez que yo puse una expresión similar...

5 comentarios:

Ramón dijo...

¡En el ensayo general de la quedada!

mariett dijo...

venga hombre ,no seas así y déjasela un rato jajajaj

Anónimo dijo...

Pues no sé cuándo habrás puesto esa cara por última vez, pero tu sobrino se parece una bararidad a ti :D

Ainhoa dijo...

Es cierto que es increíble la capacidad de asombro de los niños. Cierto, tu sobrino se parece a ti.
Te echamos de menos el sábado, pero repetiremos, no? Que éramos muchos y no pudimos hablar con todos. Bilbao sigue como siempre?

Bultza dijo...

jeje, que nooo, mucha gente me dice que se parece a mi pero si comparo mis fotos de pequeño no nos parecemos casi nada!

Bilbao como siempre, me quedé con muchas ganas el sábado, a ver si hacemos algo parecido pronto ;)